Jornada 2: Picotas 39 - 38 Kalandrakas

El pasado domingo se disputó un partido que tiene visos de convertirse en un clásico. Los Picotas se enfrentaron a Kalandrakas en un choque intenso para las alturas de temporada en las que nos encontramos. Ambos equipos no defraudaron y dieron todo lo que tenían dentro para llevarse la victoria. Esta vez cayó del lado de los Picotas, que supieron administrar la ventaja que adquirieron en el tercer cuarto (sorprendentemente el de las pájaras) aunque con más apuros de los esperados tras el cortocircuito sufrido tras la lesión de Enrique.

El partido comenzó con un ritmo trepidante. Tras una buena circulación del balón, Dani enchufaba un triple en su primer lanzamiento. En la siguiente jugada, Alberto salía disparado al contraataque y superaba con velocidad el mal balance visitante para anotar una bandeja por la izquierda. Kalandrakas tenía las ausencias de sus dos jugadores interiores de otros años, uno de ellos en Familia Monster como ya comentamos en la anterior crónica, y el 10, máximo anotador en otros encuentros, que no sabemos si habrá abandonado la disciplina de su equipo o simplemente no pudo venir. Sin embargo, parecen tener una fuente inagotable de pivots altos, con buenos movimientos cerca del aro y buena muñeca desde posiciones intermedias. Esta vez fue el número 5, un señor de más de metro noventa quien sorprendió clavando un triple como réplica.

Pero Dani estaba especialmente motivado y preciso y de nuevo encestaba de tres en la siguiente jugada. Acto seguido Sergio lanzaba desde cinco metros en uno de sus característicos tiros a 45º de la mediatriz del tablero. E Inchausti anotaba un tiro libre tras ser objeto de falta. El 5 iba a anotar de nuevo para acercar a su equipo en el marcador al final del cuarto. 11-8 a favor de los Picotas.

En el inicio del segundo cuarto, Inchausti seguía con las pilas cargadas y tras dos buenas acciones, ponía 8 puntos de por medio. Sin embargo, Kalandrakas supo diversificar más su juego y otros jugadores además del 5 comenzaron a aportar su granito de arena. Los Picotas hacían la goma, manteniendo siempre una ventaja de entre 4 y 8 puntos. Enrique se encargaba de anotar , lanzando desde posiciones cercanas. Al final de la primera parte el marcador indicaba un esperanzador 22-18. El juego, con las deficiencias propias de quien lleva tanto tiempo inactivo, era bastante fluido y había una clara mejoría en el movimiento del balón con respecto al partido pasado.

En el tercer cuarto, tras haber errado varias veces, Óscar afinó su puntería y encestó su primer triple del partido, pero rápidamente fue contestado con dos canastas del 14 y el 5 de nuevo, aprovechando la diferencia de peso y estatura con respecto a su defensor. Mas Dani y Enrique no iban a dejar que el partido se les fuera de las manos. El primero encestando un casi-triple y el segundo anotando los dos tiros libres de los que dispuso. Cuando parecía que iba a suceder lo mismo que en los anteriores periodos, esto es, los Picotas se ponen por delante y en el último minuto unas canastas de Kalandrakas volvían a sembrar la incertidumbre, Alberto dio un paso al frente. Pero no lo digo en sentido figurado, sino que fue lo que hizo literalmente, avanzar un paso hacia el aro. Negado en los triples como estaba, fintó el tiro para aproximarse y lanzar libre de marca. Y segundos después finalizaba un contraataque debajo de la canasta tras recibir un gran pase de Dani, para dejar el marcador de nuevo con la máxima ventaja: 33-25. Eran los mejores momentos de los Picotas, defendiendo bien, saliendo rápido a la contra, eligiendo buenos tiros y divirtiéndose.

No obstante, Kalandrakas no iba a dar su brazo a torcer y en el último cuarto salieron con la intención de remontar la desventaja adquirida. Primero el 10 y luego el 5 recortaban distancias y ponían en aprietos a los de azul. Su defensa se endureció y cada canasta costaba un mundo. David M. fue a la línea de personal para anotar uno de dos. Aunque parezca sorprendente, en los dos partidos disputados los Picotas no han bajado del 50% en tiros libres. Mejor que sus rivales en ambos encuentros.

El 17 ponía a su equipo a tan solo 3 puntos, pero Alberto acertaba de nuevo desde media distancia. Y entonces sucedía lo peor. En una jugada sin aparente relevancia, peleando por un rebote ofensivo, Enrique pisaba el pie del número 5 al caer y su rodilla se doblaba en una antinatural postura. Padre Benito caía al suelo entre terribles sufrimientos y por sus gritos todos nos temimos lo peor. Las palabras de la árbitro, refiriéndose a haber escuchado un crack, no animaban precisamente.



El juego estuvo parado unos instantes y a la vuelta, los Picotas tardaron en reaccionar. Cuando los Kalandrakas se ponían a tan sólo dos puntos, emergió la figura de Óscar, que con un triple volvía a poner tranquilidad. Al 5 no le tembló la mano esta vez desde la línea de tiros libres, pero en la posterior jugada no supieron administrar los segundos que quedaban y cuando le hicieron la falta a Dani para parar el crono, ya había transcurrido demasiado tiempo. Para colmo, éste falló los dos tiros libres y el rebote fue a parar a las manos de Óscar y ahí se acabó el partido.

El resultado final: Picotas 39 - 38 Kalandrakas.



Estadísticas:

JUGADORES	PUNTOS	TRIPLES	TLA	TLI	%TL	FALTAS
1. David Milla	1	0	1	2	50	1
2. Dani	10	2	0	2	0	2
4. Inchausti	4	0	2	4	50	1
5. David
10. Enrique	6	0	2	2	100	2
11. Alberto	10	0	0	0	0	2
15. Sergio	2	0	0	0	0	3
16. Antonio
24. Arrojo
33. Óscar	6	2	0	0	0	4
Total	39	4	5	10	50	15