Crónica Picotas vs KK Trato Bosnio (Parte I)

Heroica, con tintes épicos, sublime... esos fueron los calificativos aplicables a la actuación de los Picotas esta semana. Uno sólo puede sentirse orgulloso de lo conseguido en la segunda jornada. No fue el mejor partido, aún hay mucho margen de mejora. Se permitió una remontada inverosímil que jamás debió producirse. Y sin embargo, el esfuerzo hasta extenuación que hicieron todos mereció la pena.

Los Picotas se presentaron al encuentro con tan solo seis efectivos. Viajes, trabajo, lesiones... y lo peor es que ninguno de los tres hombres más altos del equipo pudo asistir, precisamente el punto fuerte de los rivales de esta semana, KK Trato Bosnio, antes HFCTIM.

FESTIVAL EXTERIOR

Con este panorama, el partido arrancó con Óscar inspiradísimo desde la línea de tres puntos con tres triples consecutivos de tres intentos. Un parcial de 11-1 obligaba a los de rojo a pedir un tiempo muerto para intentar imprimirle más intensidad a su defensa, hasta el momento bastante pasiva. En la contrapartida, el árbitro puso el listón de la falta muy alto y muchos contactos dentro de la zona fueron sancionados. Jesús se puso con dos muy pronto, y tanto David Milla como Enrique acumularon sendas infracciones en los primeros minutos, lo que hacía presagiar que más de uno no terminaría el encuentro.

David supo aprovechar esta circunstancia y se desgastó en penetrar una y otra vez por la zona rival, sacando faltas y yéndose a la línea de personal con acierto dispar (anotó el primero y falló el segundo hasta en tres ocasiones en el cuarto). A falta de dos minutos para el fin del primer cuarto, los Picotas se encontraban 8 arriba en el marcador, pero una jugada de dos más uno, seguida de otras dos canastas tras recibir cerca del aro o recoger el rebote ofensivo, volvían a meter a los visitantes de lleno en el partido.

El cuarto concluyó con 14-11 en el marcador, pero la sensación de que la dinámica estaba cambiando y quien llevaba el ritmo del partido era KKTB.

SEQUÍA ANOTADORA

Efectivamente, los malos augurios se hicieron realidad. El partido se espesó, como ya sucediera en la primera jornada y los Picotas no eran capaces de acertar con el aro. 9 largos minutos transcurrieron hasta que David convirtió un tiro libre que ponía fin a la sequía anotadora. El dato positivo es que KKTB tampoco era capaz de anotar con fluidez y únicamente la superioridad en altura y kilos hacía que tras segundas o terceras oportunidades los puntos llegaran a su casillero.

Tras dos canastas consecutivas del número 7, la ventaja visitante ascendió hasta los 6 puntos, pero una acción de dos más uno de Jesús, atacando el aro con decisión después de recibir en un lateral del cuadrado ofensivo completamente libre de marca, dejaba el no-electrónico 18-21 al final del cuarto. La fatiga comenzaba a hacer mella en el estado físico de los Picotas, podía apreciarse en sus caras y en sus gestos de dolor.

En líneas generales, la primera parte había dejado buenas sensaciones. En los momentos difíciles se habían conseguido controlar los nervios, apretar en defensa y no dejarse llevar ante las adversidades. Todo quedaba abierto para la segunda parte, que se planteaba apasionante y que podréis seguir leyendo próximamente.

Permaneced atentos a la web y a las redes sociales, que aún falta lo mejor.